[ad_1]
La articulación de la rodilla parece ser una articulación uncomplicated, pero en realidad es la articulación más complicada del cuerpo humano. Suele doler más que a los demás. Cuatro huesos forman la articulación de la rodilla: fémur, tibia, peroné y rótula.
El fémur es el hueso más grande del muslo, por lo que también se le llama hueso del muslo. Justo debajo de la tibia (tibia) está el peroné y luego la rótula, también conocida como rótula.
Los cuatro ligamentos ayudan a mantener unidos estos huesos. Uno de los ligamentos colaterales es el ligamento colateral medial, abreviado como MCL. También se le llama ligamento colateral tibial. Se encuentra en el inside de la rodilla y conecta el fémur con la tibia.
Una lesión de MCL ocurre cuando la superficie externa de la rodilla es golpeada y estirada. El daño tisular depende de la fuerza aplicada a la rodilla. La lesión del MCL también puede causar una lesión del menisco del cartílago medial. La rodilla tiene dos meniscos cartilaginosos: uno en la superficie medial o interna y el otro en la superficie lateral o externa remarkable de la tibia.
Las lesiones de MCL se clasifican en tres grados según la gravedad de la lesión. En una lesión de grado 1, se daña el 10 por ciento del tejido. En el grado 3, el 100 por ciento del tejido está dañado. El nivel 2 está, por supuesto, en algún punto intermedio.
Los síntomas de una lesión de MCL varían según el tipo de lesión. Los síntomas de grado 1 incluyen sensibilidad leve, generalmente sin hinchazón y sin inestabilidad de la rodilla. Cuando se aplica fuerza en la parte exterior de la rodilla, el dolor se siente mientras la rodilla está doblada 30 grados. Con una lesión de grado 2, la rodilla puede hincharse y causar dolor cuando la rodilla se dobla 30 grados.
Con una lesión de grado 3, se produce dolor y el paciente puede sentir que la rodilla está inestable y cede. Las pruebas de evaluación de MCL se realizan para diagnosticar una lesión de MCL. Estas pruebas incluyen un cuestionario sobre problemas generales de salud y lesiones recientes. El médico también realizará un examen físico para averiguar la causa del dolor. Las pruebas musculares resistidas y la prueba de esfuerzo en valgo son dos pruebas que se realizan.
El tratamiento no quirúrgico de una lesión del MCL incluye reposo, hielo, compresión y elevación. El paciente también puede usar una rodillera o un inmovilizador de rodilla como apoyo. Después de una lesión, se debe consultar a un médico lo antes posible. Nadie puede permitirse una lesión de ligamentos.
Este artículo proporciona la información básica sobre MCL y lesiones de MCL. Si tiene algún problema de salud en la rodilla, debe consultar a su médico.
[ad_2]