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A finales de los años 20, cuando los tiempos eran difíciles y la Depresión estaba en pleno apogeo, se dice que Herbert Hoover acuñó el eslogan de que si period elegido, habría un «pollo en cada olla». Los historiadores pueden concluir que el término period poco más que un eslogan de campaña, pero el pensamiento aún provoca la visión de que todos deberían poder pagar alimentos para alimentar a sus familias.

Hoy en día, nuestros pensamientos giran más en torno a la conservación de energía y la reducción de la dependencia del petróleo extranjero. Un molino de viento para cada techo debería estar más en línea con esta mentalidad. Como nación, estamos demasiado conectados con otros países en el escenario mundial, lo que socava nuestra capacidad de liderar el mercado global. Si dependiéramos menos de los combustibles fósiles para nuestras necesidades energéticas, podríamos estar mejor posicionados financiera y estratégicamente.

Esta estrategia se puede aplicar no solo a modelos comerciales, sino también a edificios residenciales. Actualmente existe tecnología para convertir la energía eólica y solar en electricidad doméstica. A medida que estos ideales se generalicen, impregnarán nuestra sociedad e impulsarán a los mercados a desarrollar soluciones rentables para el propietario típico.

Hoy en día, cada vez más empresarios están desarrollando sistemas que están disponibles para la compra. Cada vez son más las personas que ofrecen planos y kits para construir sus propios aerogeneradores domésticos. Aunque el viento no está disponible el 100 % del tiempo, estos sistemas pueden almacenar energía en unidades tipo batería, lo que permite al propietario complementar el uso ordinary de energía.

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Incluso algunas ciudades están introduciendo programas piloto para permitir el uso de sistemas basados ​​en el viento para complementar las redes eléctricas. En este momento, París Francia está introduciendo un programa de este tipo en cuatro distritos. Como parte de este programa, los sistemas están diseñados para perturbar menos el paisaje y preservar la apariencia tradicional de los horizontes.

A medida que todos los países intentan alejarse de los combustibles fósiles, la estrategia para buscar fuentes de energía renovable para alimentar nuestros hogares no solo recae en los gobiernos, sino también en las personas que viven en todos los rincones del mundo. Con el tiempo, la convergencia de la demanda, la economía y la tecnología ayudará a impulsar el mercado hacia un futuro más sostenible que utilice recursos renovables para satisfacer nuestras necesidades energéticas. Como administradores de nuestro planeta, depende de nosotros encontrar formas de mantener una posición responsable en el mantenimiento del delicado equilibrio entre las personas y la naturaleza. A Molino de viento para cada techo tal vez sólo el eslogan que necesitamos en el clima económico y ambiental actual.

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Por Julieta

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